La Nueva Carne es un movimiento artístico surgido a finales del siglo XX, cuyos principales representantes son R.H Giger, David Cronenberg y Clive Barker en los campos del diseño, cine y literatura respectivamente. La Nueva Carne abre un universo hacia una concepción diferente de lo bello y de la sexualidad no coital, a través de la trasmutación y la alteración estructural del cuerpo. De este modo, el tejido corporal se remodela para abrir paso a nuevas estructuras de placer, nuevos orificios y terminaciones nerviosas que provocan extremo dolor y goce. La influencia del BDSM, en el que el dolor es indivisible del placer, constituye una de las bases que asienta este movimiento artístico. Así, se exponen cuerpos de belleza insubordinados a los cánones impuestos. Formas grotescas para algunos o atractivas para otros que muestran representaciones perversas ligadas a la experimentación corporal.
La Nueva Carne se ha servido del género de terror para expresarse, pero no del modo en el que previamente este se entendía. Frente al horror cósmico, a lo desconocido o al malvado villano, en la Nueva Carne la víctima deja de serlo para abordar la posición de héroe a través de su consentimiento. De este modo, la figura pasiva del sujeto toma parte activa, decidiendo y consintiendo aquello que constituye el horror. Se trata de una nueva perspectiva, no solo de mostrar el miedo, sino de percibirlo. De este modo, la huida, la lucha, el enfrentamiento o el triunfo del héroe frente al villano pierde su esencia. No se trata de vencer al miedo, ni de superarlo, sino de vivirlo y experimentarlo.